Por Mateo Garzón
Un nuevo rostro para el fútbol chileno. Así se presenta la selección nacional, si nos atenemos a los valores de mercado de sus jugadores. Según el portal Transfermarkt, los diez futbolistas chilenos más cotizados son Ben Brereton Díaz, Darío Osorio, Damián Pizarro, Guillermo Maripán, Williams Alarcón, Paulo Díaz, Erick Pulgar, Diego Valdés, Víctor Dávila y Alexander Aravena.
Un dato que llama la atención es que, de los diez jugadores más valiosos, solo cuatro militan en el fútbol europeo: Ben Brereton Díaz (Blackburn Rovers), Guillermo Maripán (Mónaco), Paulo Díaz (River Plate) y Erick Pulgar (Flamengo). Esta realidad evidencia una cierta dificultad para exportar talento chileno al Viejo Continente, lo que podría limitar el crecimiento individual de estos jugadores y, por ende, el nivel general de la selección.
La Roja atraviesa un proceso de renovación que busca dejar atrás el ciclo de la generación dorada. Sin embargo, este cambio no ha sido del todo exitoso, y la selección ha tenido dificultades para clasificar a los últimos mundiales.
La presencia de jóvenes talentos en la lista de los más valiosos es una señal positiva, pero es fundamental que estos jugadores tengan continuidad en sus clubes y que sean respaldados por un proyecto deportivo a largo plazo. Además, la Federación de Fútbol de Chile debe trabajar en conjunto con los clubes para desarrollar un sistema de formación de jugadores que permita identificar y potenciar los talentos desde temprana edad.
La construcción de una nueva selección chilena es un proceso que requiere tiempo y paciencia. Los jóvenes talentos deben tener la oportunidad de madurar y de ganar experiencia en competencias internacionales. Además, es fundamental que el cuerpo técnico de la selección sepa aprovechar al máximo las cualidades de estos jugadores y que les brinde la confianza necesaria para desenvolverse en el alto nivel.
La Roja cuenta con un grupo de jóvenes talentos que pueden marcar una nueva era en el fútbol chileno. Sin embargo, es necesario trabajar en conjunto para potenciar estos talentos y construir un equipo competitivo a largo plazo. La exportación de jugadores al fútbol europeo es un desafío fundamental para el crecimiento del fútbol chileno.
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