La Roja cerró el 2024 con una victoria clave ante Venezuela por 4-2, que dejó a la selección chilena con vida en su sueño de clasificar al Mundial de 2026. Sin embargo, la larga pausa entre partidos de las Eliminatorias Sudamericanas ha llevado a la ANFP a gestionar un amistoso antes de las próximas fechas FIFA. El 8 de febrero, Chile recibirá a Panamá en el Estadio Nacional, un encuentro que servirá como preparación para los desafíos más exigentes que se avecinan.
Este partido será fundamental para que Ricardo Gareca, el nuevo técnico de La Roja, pueda evaluar a los futbolistas locales y su nivel de competencia después de un mes de actividad en sus respectivos clubes.
Debido a que el partido no corresponde a una fecha FIFA, los clubes no están obligados a ceder a sus jugadores, lo que llevó a Gareca a tomar la decisión de convocar solo a futbolistas del torneo chileno. De acuerdo con Chilevisión, este será un primer contacto del "Tigre" con los mejores talentos nacionales, especialmente si se resuelve el paro del Sifup, lo que permitiría el inicio de la Copa Chile y las ligas profesionales.
Este encuentro servirá a Gareca como una prueba para evaluar el rendimiento de los jugadores nacionales en un contexto competitivo, sin la presión de enfrentar selecciones de primer nivel.
Tras el amistoso contra Panamá, La Roja tiene programado un calendario de partidos cruciales en las Eliminatorias. En marzo, enfrentará a Paraguay en Asunción y a Ecuador en Santiago por las fechas 13 y 14. Luego, en junio, el desafío será doble: Argentina en Santiago y Bolivia en El Alto, con un cierre en septiembre que llevará a Chile a Brasil y luego a Uruguay en el Estadio Nacional.
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