Ya no es México, el nuevo pozo sin fondo de los chilenos en el extranjero

Nicolás Castillo, Igor Lichnovsky y Nicolás Díaz, son varios los chilenos que, luego de romperla en la liga local o en el extranjero, terminaron recalando en el fútbol mexicano en busca de mejores contratos o de poder relanzar sus carreras en el fútbol foráneo, pero con el mismo común denominador: se han quedado estancados en el país azteca.

En el caso de Castillo por una lesión y pocas oportunidades, en el caso de Lichnovsky, más bien, por cariño al club y su buen rendimiento y, en el caso de Díaz, porque no ha podido retomar el nivel con el que empezó jugando; sea cual sea el motivo, la misma hinchada chilena no tuvo dudas en tildar a México como un destino ‘mata carreras’. 

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Y aunque hay jugadores que sí pudieron salir o consolidarse en el fútbol mexicano, como el caso de Felipe Mora y el recordado paso de Humberto ‘Chupete’ Suazo en el Monterrey, la gran mayoría de los pertenecientes a la colonia chilena en el país norteamericano han tenido que lidiar con una liga que no termina de posicionarse entre las tops a nivel extranjero. 

Es por esto, tras la llegada del defensa Francisco Sierralta al Watford y la de Marcelino Núñez al Norwich City, surgen dudas respecto de la conveniencia de optar por destinos ‘de mediana trascendencia’, pese a la buena consideración que tiene la Championship en Europa. Sin estar directamente metidos en el ascenso y perdieron chances de titularidad, la situación complica. 

¿Podrán dar el gran salto en Inglaterra?

Dejando el caso de Brereton fuera de análisis y como excepción, debido a la gran cantidad de años que el delantero estuvo antes de poder salir de segunda, los casos de Marcelino y Sierralta parecen depender de solo una cosa, además del rendimiento personal y la gestión de sus fichajes: ascender. Algo díficil, ya que solo suben tres equipos por temporada, pero que los condiciona.