Por Santiago Rojas
El fútbol está lleno de historias de fracasos de futbolistas de los que se esperaba mucho de ellos, pero que finalmente tomaron una mala decisión o la fortuna no estuvo de su lado. Lamentablemente los futbolistas no suelen aprender de estas y siguen cometiendo errores.
En las últimas semanas ha vuelto a sonar el caso de Ezequiel Cirigliano, volante de River Plate que asomó en 2010 como uno de los mejores futbolistas de las inferiores del cuadro millonario. Por su posición, su personalidad y juego, fue comparado rápidamente con el capitán de la selección argentina, Javier Mascherano.
El volante llegó al primer equipo de River Plate con mucha expectativa, pero no empezó a tener toda la regularidad esperada. Aun así, su nombre ya era importante, a pesar de su corta carrera. Colo Colo de Pablo Guede lo quiso traer, pero el jugador decidió seguir en Argentina, aunque era suplente.
Acá en los albos pudo haber sido titular y jugar con regularidad, pero decidió quedarse en Argentina, donde comenzó a tener los primeros problemas de comportamiento que lo hicieron salir de River. Estuve en Italia, sin éxito, y comenzó un periplo por distintos clubes. Hasta en San Luis de Quillota estuvo jugando seis meses en 2021, antes de que pasara lo peor.
En 2021 fue detenido junto a unos amigos por intentar ingresar a una propiedad con armas de fuego. Estuvo preso y River Plate acudió en su ayuda. Hoy, con 31 años, juega en el equipo senior del club y busca una oportunidad para regresar al fútbol profesional. Ningún equipo lo ha querido, menos Colo Colo.
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024